Varias veces en su viaje a Estados Unidos desde Ecuador, la familia casi pierde a uno de los suyos.
Mientras cruzaba un traicionero tramo de 60 millas de selva tropical, ríos y montañas entre Colombia y Panamá llamado Darién, el padre casi se ahoga en un río cargando a su nieto sobre sus hombros y su pequeño hijo casi fue arrastrado por la corriente.
Pero después de más de un mes de viaje, la familia (un padre, una madre, una hija adulta con un hijo pequeño, un hijo adolescente y un niño pequeño) finalmente llegó a la frontera de Estados Unidos.
Ahora, la familia de seis miembros se encuentra entre los aproximadamente 600 solicitantes de asilo de todo el mundo que viven en hoteles en el oeste de Nueva York.
The Buffalo News entrevistó al padre, la madre y la hija adulta poco después de su llegada al oeste de Nueva York en julio. La familia habla principalmente español, por lo que Catharine Grainge, directora de defensa del Centro de Salud Comunitario Jericho Road, tradujo la conversación.
Buffalo News no identifica a los familiares debido a las circunstancias de las que huyen y su temor a represalias.
Fue un viaje difícil llegar a los Estados Unidos, pero la fe de la familia en Dios y el amor mutuo los ha sostenido.
“A veces pienso en lo que hubiera pasado si hubiéramos perdido a uno de nuestros familiares durante el viaje”, dijo la madre entre lágrimas. “Y estoy muy agradecido de que estemos aquí como familia y podamos estar juntos. Y realmente quiero que la gente no piense en nosotros con malas ideas o ideas falsas. Simplemente estamos aquí para tener una oportunidad”.
